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El secreto para que su hijo tenga más éxito en el próximo año escolar.

R-E-L-A-J-A-C-I-Ó-N

Todos los padres con niños con necesidades especiales tienen la misma obsesión: ¡estimulación!

Comúnmente se cree que mientras más estimule a su hijo física y mentalmente, mayor es la posibilidad de verlo mejorar tanto funcional como cognitivamente. Sin embargo, ¿ha pensado en cuánta energía esta constante estimulación, y a veces sobre estimulación, requiere su hijo? Existen 5 fuentes de las cuales obtenemos nuestra energía: alimentos, adecuadas funciones metabólicas, hidratación, respiración apropiada y sueño. Si observamos más detenidamente podremos darnos cuenta que los niños con PC no se alimentan tanto como los niños saludables, no digieren tan fácilmente, ingieren menos líquidos (generalmente mucho menos), a menudo tienen problemas respiratorios y sufren de falta de sueño. Por todas estas razones, se ha demostrado que un niño con PC gasta 3 veces más energía que sus compañeros para llevar a cabo cualquier actividad, ya sea intelectual, motora o simplemente de función vital. Por ejemplo, una hora en el transporte adaptado para ir a la escuela (media hora ida y vuelta) representa para su hijo la fatiga de 3 horas en coche. Y esto aún sin tomar en cuenta la estimulación. Ver un video durante una media hora representa hora y media de fatiga; estar en un ambiente ruidoso puede estresarlo 3 veces más que a cualquier otro niño. En resumen: no hay ningún excedente restante (siempre disponible en niños sanos) para crecer, prosperar y florecer como ser humano.

Tenga esto en cuenta durante el próximo año escolar. Existen técnicas para mejorar la respiración, la digestión y el sueño por medio del fortalecimiento de sus debilitados tejidos conectivos (todos los niños con CP tienen un débil tejido conectivo el cual es responsable del metabolismo deficiente). Sin embargo, si usted aún no ha comenzado a trabajar con estas técnicas especialmente diseñadas para ese fin, puede al menos intentar limitar la estimulación y permitirle tanta relajación como sea posible cuando regresan a casa desde la escuela. Convierta su casa en un ambiente relajante. Baje el volumen del televisor o sustituya la TV por música suave; déle un baño relajante; lo más importante: deje de sentirse obligado a entretener a su niño cueste lo que cueste. Permítale tiempo libre (sí, déjelo solo durante unos minutos), déle la oportunidad de reencontrarse consigo mismo. En fin, ¡a relajarse y disfrutar del poder estar juntos! Usted notará una gran diferencia en su desempeño durante el año escolar.

One Comment
  1. Ingrid Cárdenas Agoni

    Agradecerles por el tiempo de escribir y darme tips para mejor la calidad de vida de mj hijo Martin

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